
Cada vez que paso por su lado
No veo nada más.
Rositas Violáceas, tal como me gustaban cuando era chica.
Un mar de ellas, el viento las convierte por momentos en suaves olas.
De día en todo su esplendor,
De noche se cierran en su mundo.
Pequeño, de por sí. Y finito.
Qué pasará allí dentro?
Me recuerda un poco a mi vida. Mi mundo.
Yo también te quiero Lucy Moon!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarmañana a la mañana nos vemos, ya debería estar durmiendo! jajaja
pero bueno, viste cómo es esta garcha que te atrapa.
Creo que juntas nos destartalamos las mentes!